Existe una cultura amigable para los negocios en Costa Rica sin restricciones para la propiedad de empresas extranjeras. Aunque el Código de Comercio de Costa Rica estipula que «a los extranjeros se les permitirá hacer negocios una vez que hayan obtenido el estado de residencia por más de diez años», es común que los extranjeros inicien un negocio en el país sin ser residentes, simplemente por incorporar una empresa costarricense. Incluso puedes establecer un negocio con una visa de turista de 90 días.

Sin embargo, aunque puedes ser propietario de un negocio, no se te permitirá trabajar realmente en ese negocio, ya que Costa Rica fomenta el empleo de su fuerza laboral local. Por lo tanto, es importante retirarse un poco de las operaciones diarias para evitar cualquier problema.

Como las reglas pueden cambiar, siempre vale la pena conectarte con tu respectiva embajada antes de tomar cualquier medida, así como ponerte en contacto con la Cámara de Comercio de Costa Rica, la Agencia de Promoción de Inversiones de Costa Rica o Procomer (Promotora del Comercio Exterior de Costa Rica) para obtener asesoramiento. y más información sobre los requisitos.

Antes de comenzar un negocio en Costa Rica, ten en cuenta que la documentación y la planificación involucradas pueden ser extensas y que siempre existe un elemento de riesgo, independientemente del tipo de negocio que desee iniciar. Por lo tanto, es importante asegurarse de tener suficiente capital inicial, así como un modelo de negocios sólido y una comprensión profunda del entorno de trabajo.

Estate preparado para establecer una empresa que pueda llevar mucho más tiempo y costar más de lo que inicialmente podrías esperar, ya que podrías necesitar importar ciertos alimentos, materiales de construcción, muebles y tecnología. Los trabajadores de la construcción costarricenses tienen la reputación de no ser siempre confiables, y una jornada laboral puede pasar sin que ellos se presenten. Pura vida es la filosofía relajada en Costa Rica, y este enfoque relajado de la vida tiene sus pros y sus contras cuando se trata de establecer un negocio.

Estructuras empresariales

Dependiendo del tipo de negocio que desees configurar, deberás decidir cómo estructurarlo. Hay una serie de estructuras legales disponibles, como una sociedad general, una sociedad limitada, una empresa unipersonal y una entidad corporativa.

Sin embargo, el tipo más común de sociedad de responsabilidad limitada es la Sociedad Anónima (SA), que sólo está sujeta a la contribución de capital de los accionistas, y ofrece muchos de los mismos beneficios y protecciones que tiene una empresa norteamericana o europea. Normalmente está formada por una junta directiva formada por un presidente, un secretario y un auditor. Establecer este tipo de corporación significa que tus ingresos y activos personales no estarán en riesgo, y muchos dueños de negocios también ponen sus activos a nombre de las SA para protegerlos también.

La otra opción principal de la corporación es la Sociedad de Responsabilidad Limitada (SRL), que está diseñada para pequeñas empresas. Tiene las ventajas de que ofrece una corporación de responsabilidad limitada, pero también permite una junta directiva de un solo hombre, lo que facilita los trámites.

Los costos para formar una corporación pueden variar mucho, pero en general, debes prepararte para gastar entre US$300 y US$1,000 para establecer y registrar tu empresa en el registro público.

fuente: https://www.expat.com/